
Desde el cementerio, Marcos Gómez pidió nuevamente justicia: «Lleguemos a que las cosas cambien, por qué nuestros hijos tienen que salir a la calle con miedo, por qué no pueden salir a jugar, los secuestran los matan».Tras el último adiós a Kim, la nena de 7 años asesinada en Altos de San Lorenzo en un caso que escandalizó a la ciudad de La Plata, su padre, Marcos Gómez, se dirigió a los medios de comunicación y expresó: “Estoy con el alma rota, vamos a tomar fuerzas de donde se pueda y vamos a luchar, yo no quiero que esto quede así, quiero que las cosas cambien, no sólamente para Kim, para que descanse tranquila, para todos, para mi hijo Ciro, para los hijos de ustedes, de mis amigos, para nosotros mismos”.
El caso de Kim sacude no sólo a La Plata, sino también al país: este miércoles por la tarde una multitud se reunió en Plaza Moreno para pedir justicia y seguridad, y varios manifestantes agredieron a la Municipalidad y rompieros un vidrio de contención y ventanas.