Uno de los emblemas de este equipo, Pablo de Blasis, ingresó en la segunda parte y nuevamente el Lobo lo ganó sobre la hora. Como en la victoria agónica ante Belgrano de Córdoba, Marcelo Méndez utilizó la misma fórmula para ganarle a Argentinos Juniors: la experiencia. Un día fue Lucas Castro, aunque esta vez le tocó a Pablo de Blasis, que entró desde el banco de los suplentes para hacer delilar a un Bosque que se sube a la ilusión.
Sin embargo, la situación de De Blasis era un tanto diferente dado que el mediocampista y referente del plantel de Gimnasia venía de sufrir una ruptura meniscal que lo dejó fuera de las canchas durante más de un mes y se dudaba de su vuelta hasta dentro de un tiempo.